lunes, mayo 08, 2006
viernes, mayo 05, 2006
Escritos
Madre…..es una palabra sagrada que muchos hombres y mujeres llevamos en nuestro corazón….En ella se esconde la historia de grandes vencimientos, sacrificios, heroísmos, lagrimas y generosidades…
Gritar “`! Madre!” es invocar de nuevo aquella mujer buena que tantas veces nos atendió, nos enjugó las lagrimas, nos sirvió, nos alimento y nos empujo para que supiéramos los tiempos difíciles y siguiéramos adelante.
Solo una madre tiene el amor que no va….ni viene.../ni se pierde…ni disminuye…ni se cansa.
“Madre…gracias por ser la columna vertebral de la familia”
“Madre…has sido para tus hijos punto de referencia, punto de partida y punto de encuentro”
“Madre…confidente y cómplice de todos nuestros proyectos e ilusiones”.
“Gracias madre…por dar tanto y no pedir nada”
miércoles, mayo 03, 2006
El festival Titirimundi aunque con sede en Segovia, llega a todas las provincias de la comunidad, gracias a la Red Regional de Teatros, dependiente de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León. El día 7 de Mayo podemos ver un extraordinario espectáculo en Villafranca del Bierzo (como ya viene siendo tradición), a las 19:00 horas en el teatro Villafranquino, el lleno está garantizado así que date prisa para conseguir tus entradas. Y no podía ser de otra manera por que actuará la italiana Figli D'Arte Cuticchio , con la Opera dei pupi (El gran duelo de Orlando y de Reinaldo) una autentica joya.
El 18 de Mayo de 2001 el Director General de la UNESCO proclamaba las primeras 19 obras maestras del patrimonio oral e inmaterial de la humanidad, en este selecto grupo figura L´Opera dei Pupi, un género teatral que hunde sus raíces en el Siglo XIX. Es el teatro de títeres de Nápoles y de Sicilia, y de las marionetas de guerreros armados; un tesoro cultural a preservar y vivificar.
Esta particular forma teatral, muy popular durante cerca de un siglo, sufrió una profunda crisis en los años devastadores del desarrollismo económico, de la emigración y de la televisión. Años que vieron la transformación de poblaciones y regiones, cambiaron costumbres y generaron una pérdida general de identidad social y artística. En esa época de desarraigo cultural, las marionetas se vendían a museos o a colecciones privadas y muchos titiriteros se vieron obligados a abandonar la profesión. Los pocos teatros que resistieron hacían sus representaciones, casi exclusivamente, para turistas o para niños. Afortunadamente hoy soplan aires renovadores. Se percibe el entusiasmo vitalista de los “pupari”, muchos de los cuales han retomado el hilo de una tradición interrumpida, recuperando historias, teatros y marionetas, heredadas de unos padres o abuelos, que se vieron forzados al abandono de su arte. Algunos, como los Cuticchio o los fratelli Napoli, nunca dejaron de trabajar. Entre todos estos marionetistas destaca Mimmo Cutticchio, heredero de una gran tradición, atrevido y valiente innovador, convertido desde hace más de veinte años en el paladín más fiel de este riquísimo legado. “El duelo de Orlando y de Reinaldo, por el amor de la bella Angélica” La ciudad de París está asediada y numerosos paladines de la Corte de Carlomagno se hallan ausentes, ocupados en correrías galantes, pretendiendo el amor de la bella Angélica. También Orlando, el Capitán General y el más valiente de todos, ha abandonado la Corte, obligando al Emperador a confiar el mando de la armada francesa a Reinaldo. En el fragor de las batallas y encuentros con dragones y otros seres fantásticos, también Reinaldo abandona su deber, inflamado de amor por Angélica, la pretendida de Orlando. Los dos Paladines se retan en duelo y solo la providencial intervención